Según datos del TRAC (Transactional Records Access Clearinghouse), el centro de análisis de la neoyorquina Universidad de Syracuse que periódicamente publica datos de las cortes migratorias, si el cierre continúa hasta finales de enero unos 100,000 inmigrantes verán cómo su día en corte es cancelado.
Esto es, explica TRAC, porque cada semana que el cierre parcial del Gobierno se prolonga, el número de cancelaciones se incrementará en 20,000 casos más.
Al comenzar ya con la cuarta semana del cierre parcial de la Administración federal, el más largo en la historia del país, las cortes migratorias prácticamente están paralizadas, afectando directamente a inmigrantes que habían esperado varios meses e inclusive años para llevar su caso ante un juez de inmigración.
Debido a que el liderazgo demócrata se ha negado a otorgar los fondos para financiar el muro con México que solicita el presidente Donald Trump, el Gobierno federal cerró parcialmente el pasado 22 de diciembre, dejando sin salario a unos 800,000 trabajadores.
El análisis indica que estas cancelaciones se agregan a los 809,041 casos que se encuentran ya retrasados en las cortes de inmigración, de acuerdo a las más recientes cifras del pasado mes de noviembre.
El reporte indica que uno de los estados más afectados es California, donde se han cancelado 9,424 audiencias, seguido por Nueva York, con 5,320 cancelaciones, y Texas, con 5,141.
La seguridad fronteriza y las cortes migratorias son irónicamente dos de las funciones del Gobierno más afectadas por el cierre parcial, que persiste por la insistencia de Trump en que el Congreso apruebe fondos para un muro con el que lograría, dice el mandatario, proteger al país de la migración ilegal y el narcotráfico.
La parálisis parcial de la Administración, que afecta a unos 800,000 empleados y ha obligado a suspender distintos servicios, entró hoy en su cuarta semana, sin que el presidente Donald Trump y los líderes demócratas hayan cedido un milímetro frente al muro fronterizo.
Trump reclama unos 5,700 millones de dólares para la construcción del muro, pero según una investigación publicada por el diario The Washington Post, puede tener un costo total de al menos 25,000 millones de dólares, llevar más de diez años y requerir de unos 10,000 obreros.
La agencia S&P Global Ratings ha calculado que esta situación ha supuesto una pérdida de 3.600 millones de dólares y de prolongarse por otras dos semanas sumará 6.000 millones de dólares, un coste superior al que la Casa Blanca requiere para construir el muro con México.
Este cierre parcial superó al acontecido durante el mandato de Bill Clinton (1993-2001), que tuvo lugar entre el 16 de diciembre de 1995 y el seis de enero de 1996.